Tras cuatro décadas de tranquilidad, la vida de la familia de Francisco Salgado Ochoa (67) dio un giro inesperado luego de perderlo todo a causa del colapso de una alcantarilla que provocó la inundación de su vivienda y de otras cercanas.
“Mi casa se llenó completamente de agua y quedamos en la calle. Esa alcantarilla colapsó y todo se vino abajo… ¡Ni cuando el Mitch vivimos algo así! Yo me dedico a la agricultura, mi familia es numerosa y necesitamos ayuda, por favor”, expresó Salgado conmovido.
A más de diez días de la tragedia, la angustia de la familia persiste. Aunque fueron trasladados a un albergue, Salgado asegura que su deseo es volver a levantar su hogar.
“El alcalde de Santa Lucía nos ha apoyado llevándonos a un albergue, pero necesitamos regresar a nuestra casa. Le pido al gobierno y a las instituciones competentes que nos ayuden a reconstruir lo que perdimos”, manifestó entre lágrimas.
UNA NOCHE TRÁGICA
El colapso ocurrió en el sector de Zarabanda, a la altura del kilómetro 12 de la carretera que conecta Santa Lucía, Valle de Ángeles y Cantarranas, donde se formó un enorme socavón que causó graves daños en la vía.
La emergencia se originó por la saturación del terreno tras las intensas lluvias, lo que afectó una alcantarilla deteriorada que había cumplido su vida útil. El colapso provocó inundaciones que destruyeron varias viviendas en la zona.
Salgado y los siete miembros de su familia vivieron una noche de terror e incertidumbre que marcó sus vidas. Actualmente, intentan mantener la rutina diaria, procurando que los niños continúen sus estudios, aunque la falta de un hogar estable se ha convertido en su principal preocupación.
“Le pido al gobierno que actúe. Esto no fue un desastre natural; fue una tragedia provocada por la falta de mantenimiento. Esa alcantarilla ya estaba reportada y nadie hizo nada”, lamentó el afectado.